Cuando se vende un activo fijo que previamente ha sido objeto de valorización, tiene un tratamiento contable especial.
Supongamos un activo [terrenos] por un valor en libros de $10.000.000 y una valorización de $2.000.000
Sea primero ilustrar la contabilización de la valorización del activo:
Cuenta | Debito | crédito |
191004 | 2.000.000 | |
381004 | 2.000.000 |
Ahora, supongamos que vendemos el activo por valor de $15.000.000
Cuenta | Debito | crédito |
381004 | 2.000.000 | |
191004 | 2.000.000 | |
110505 | 15.000.000 | |
150405 | 10.000.000 | |
424504 | 5.000.000 |
Como se observa, lo primero que se ha hecho es disminuir la valorización, tanto en el activo como en el patrimonio, puesto que al venderse el bien desaparece del patrimonio cualquier valorización atribuible a dicho bien.
Luego se ha determinado la utilidad del bien vendido, utilidad que se determina restando el valor en libros del bien del valor de venta.
En este caso el terreno tenía un valor en libros de $10.000.000 y el valor de venta fue de $15.000.000, de modo que la utilidad por la venta del terreno es de $5.000.000, valor que se contabiliza como un ingreso no operacional.
En este caso no se ha tocado para nada la depreciación acumulada, puesto que los terrenos no se deprecian así que no habrá ningún valor que contabilizar por este concepto.
Si se tratara de un bien o activo depreciable, se tendría que debitar la depreciación para determinar la utilidad por la venta del activo.
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