¿Cómo se debe proceder cuando el arrendador olvida reajustar el valor del arrendamiento?

El arrendador que olvida aplicar el reajuste del arrendamiento en la fecha en que la ley se lo permite, que es transcurrido el año desde el último ajuste o desde el inicio del contrato, según corresponda, en principio podría ajustarlo en una fecha posterior puesto que simplemente está aplicando el reajuste pactado en el contrato de arrendamiento.

Sin embargo, por el hecho de haber transcurrido tantos meses sin haber realizado el incremento, se puede interpretar como una modificación tácita del contrato por parte del arrendador.

En todo caso, si el arrendador decide aplicar el incremento no puede hacerlo de forma retroactiva. El incremento que se realice se aplicará hacia futuro, frente a los cánones que se causen a partir de la fecha en que se haga efectivo el incremento.

En todo caso si el arrendador hace el incremento a posteriori  y además retroactivo y el arrendatario no está de acuerdo con ello, es una situación que debe resolverse en un juicio, donde el arrendatario deberá alegar que, por el comportamiento del arrendador, quien de forma pasiva y reiterativa renunció al reajuste, se debe entender que el contrato se modificó en ese sentido, lo que, por supuesto, implica una demanda civil que puede resultar más costosa que lo que pueda representar el reajuste.

Como señalamos, no existe una norma que de forma particular regule ese aspecto, por lo que corresponde al arrendatario calificar si el reajuste tardío es justo o legal, y proceder en consecuencia.