El control interno sirve para ayudar a la empresa a que logre sus metas y propósitos en determinados tiempos, con determinados presupuestos, minimizando todo riesgo implicado en la consecución de sus objetivos; además, genera más confianza ante terceros, ante sus empleados y con sus dueños, pero sirve para mucho más.
¿Qué es el control interno?
El control interno en una empresa se refiere a un conjunto de políticas, procedimientos, prácticas y mecanismos diseñados y aplicados por la dirección y el personal de la empresa con el fin de salvaguardar los activos de la organización, asegurar la integridad de los registros financieros, promover la eficiencia operativa y cumplir con las leyes y regulaciones aplicables.
El control interno es esencial para mitigar riesgos y garantizar la gestión efectiva y confiable de la empresa.
El control interno garantiza que la empresa funcione como se espera, puesto que verifica el cumplimiento de las políticas y procedimientos previamente fijados a fin de garantizar una gestión adecuada.
Elementos clave del control interno.
Entre los elementos clave del control interno tenemos los siguientes:
- Ambiente de control: Esto se refiere al tono establecido por la alta dirección y su compromiso con el control interno. Incluye la ética empresarial, los valores, la cultura y la importancia otorgada a la integridad y la responsabilidad.
- Evaluación de riesgos: La empresa debe identificar y evaluar los riesgos a los que está expuesta, ya sean financieros, operativos, legales o de otro tipo. Esto implica identificar las amenazas y oportunidades que podrían afectar la consecución de los objetivos de la empresa.
- Actividades de control: Aquí es donde se establecen los procedimientos y políticas para mitigar los riesgos identificados. Esto puede incluir políticas de aprobación, procesos de autorización, procedimientos de reconciliación, y cualquier otro mecanismo para garantizar que las operaciones se realicen de manera adecuada y se minimicen los errores o fraudes.
- Información y comunicación: Un sistema efectivo de control interno implica la comunicación adecuada de políticas, procedimientos y expectativas en toda la organización. También implica la captura y comunicación precisa de la información financiera y operativa relevante.
- Supervisión y seguimiento: La supervisión continua y la revisión de los controles internos son fundamentales para asegurar que estén funcionando según lo previsto. Esto puede involucrar auditorías internas, revisiones de gestión y otros mecanismos de seguimiento.
Como se puede observar, el control interno es integral y no puede funcionar de forma aislada porque la empresa es una unidad conformada por departamentos, secciones, actividades y funciones diferentes que se conjugan para lograr un solo objetivo.
Objetivo del control interno.
Entre los objetivos del control interno tenemos los siguientes:
- Salvaguardar los activos de la empresa.
- Garantizar la integridad y confiabilidad de los registros financieros y contables.
- Asegurar el cumplimiento de leyes y regulaciones aplicables.
- Verificar el cumplimiento e implementación de las políticas internas.
- Maximizar la eficiencia operativa y la efectividad de los recursos.
- Prevenir y detectar fraudes y errores.
El control es parte necesaria para la correcta operación de una empresa. Si se planea, ejecuta y no controla, no se detectan las falencias de forma oportuna, lo que causa traumatismos y pérdidas en la empresa.
El control interno es dinámico.
Es importante destacar que el control interno no es un proceso estático; debe adaptarse a medida que cambian las circunstancias de la empresa y el entorno empresarial.
Las empresas a menudo realizan evaluaciones periódicas de sus controles internos y buscan mejorarlos continuamente para garantizar que estén alineados con sus objetivos y riesgos actuales.
El control detecta errores, omisiones e incluso oportunidades, y se deben fijar los parámetros para abordar esos hallazgos, los que a su vez deben ser objeto de control, por lo que es un proceso continuo de adaptación y mejora.
Lo que puede hacer el control interno en una empresa.
Mucho se ha hablado del control interno, el cual hoy en día existe en innumerables organizaciones, impulsado en gran medida por la parte gerencial que lo han puesto en marcha y, con ello, han facilitado y mejorado todo proceso interno de las compañías.
El control interno no solo es importante aplicarlo por el hecho de adquirir algún tipo de certificación, que es uno de los objetivos, ya que con estas certificaciones es más fácil la adquisición de nuevos contratos. Además, en muchas ocasiones son requisitos para lograr algún tipo de acuerdo comercial o contractual.
También es importante porque, si en una empresa se realiza una comparación del antes y después de la implementación del control interno, se dará cuenta de que mejora todo tipo de proceso en cuanto a tiempos, seguridad, calidad, desarrollo, confiabilidad, etc. Lo cual implica más crecimiento de las empresas, ya que tendrá mejores garantías para generar seguridad ante sus clientes.
En el momento de la implementación, es obvio que este genere una inversión económica por parte de la empresa y de tiempo por parte de sus directivos, así como también de empleados, lo cual ha llegado a ser el limitante que impide principalmente a las pequeñas empresas implementar el control interno, olvidando, por supuesto, que el resultado económico derivado del incremento de la eficiencia y eficacia en la operatividad de la empresa supera con creces lo invertido en el control interno.
El equipo de auditoría interna debe tener los conocimientos, habilidades, cualidades, actitud y formación suficientes para un desarrollo profesional idóneo, porque dependiendo de la calidad de las auditorías internas realizadas, así mismo será el resultado de las auditorías externas, que pueden ser un excelente complemento del control interno en la medida en que lo evalúan y pueden abordar aspectos inicialmente no considerados en él.
Al implementar el control interno, la organización debe garantizar el seguimiento apropiado a sus procesos realizados; si no, de nada sirve el trabajo ejecutado. Como también se deben estar realizando revisiones y ajustes de acuerdo a las necesidades de las operaciones, a los resultados y las evaluaciones realizadas.
Por último, resaltar que el control interno es tan importante a nivel financiero, operativo, de talento humano y demás componentes de una organización, que a nivel mundial existen tanto normas como empresas que orientan, certifican y apoyan este tipo de decisiones para el desarrollo y crecimiento empresarial.
Forma de citar este artículo (APA):
Gerencie.com. (2023, septiembre 26). ¿Para qué sirve el control interno? [Entrada de blog]. Recuperado de https://www.gerencie.com/lo-que-puede-hacer-el-control-interno-en-una-empresa.html
Muchas gracias por estos conceptos tan apropiados para implementarlos en nuestra empresa.